¡Ahora gestiono mis tareas con una libreta!
En el primer año de mi doctorado, descubrí un método para gestionar tareas que me permitió afrontar el caos y la intensidad de los años siguientes. Este método era Getting Things Done1 (GTD) y una de sus ventajas es que puedes implementarlo usando la herramienta que prefieras. En mi caso, elegí una herramienta digital, Taskwarrior, porque era la que mejor se adaptaba a mi entorno de trabajo.
La combinación de Getting Things Done y Taskwarrior me encantaba.
Sin embargo, he dejado de usar esta combinación para usar, en su lugar, el método Bullet Journal2 y… ¡una libreta física!
¿Por qué ya no uso Getting Things Done y Taskwarrior?
Este cambio fue gracias a Richard Mújica.
Conocí a Richard en la primera charla informal del Jardín de Gestalt. Desde entonces, hemos hecho más reuniones donde hablamos sobre qué métodos y herramientas usamos para trabajar. Inevitablemente, salió el tema de la gestión de tareas. Richard me explicó que a él le funcionaba mejor el método Bullet Journal que Getting Things Done, porque el método Bullet Journal —además de ser un gestor de tareas— es una forma de reflexionar integralmente (laboral y personal) sobre tu vida.
Esta última característica —una reflexión integral— es lo que resonó conmigo.
Desde el inicio de este año, he estado buscando la forma de integrar un diario en mi flujo de trabajo. En mi opinión, escribir en un diario es una forma ideal para descubrir qué es lo que realmente quieres hacer en tu vida. Y, como puedes intuir de entradas anteriores, yo estoy en un proceso activo de descubrir justo esto :-)
El método Bullet Journal satisface justo esta necesidad, es una forma de integrar un diario en tu vida para:
gestionar tus tareas
descubrir qué es lo que quieres en tu vida
alinear lo que haces con lo que quieres.
Una vez que comprendí esto, no había vuelta atrás posible, empecé a leer el libro “El método Bullet Journal” y empecé a escribir en mi propia libreta física:
Actualmente, ya he acabado el libro y llevo un mes completo usando mi propio Bullet Journal. Mi intención es profundizar más en este método por lo que ya he empezado a procesar el libro con mi Zettelkasten.
En lo que queda de entrada, te explico cómo ha sido mi primera «migración mensual» para que así puedas ver:
en qué consiste este método
por qué me está encantando tanto.
Mi primera migración mensual
El método Bullet Journal se basa en escribir en una libreta física, por lo que es inevitable tener que “lidiar” con las limitaciones de escribir en físico.
Una de estas limitaciones es que lo que escribes en una página, se queda en esa página (no existe un “copiar y pegar” como sí existe en las herramientas digitales). Por tanto, si escribes una tarea en tu registro diario, pero no la completas ese mismo día, necesitas reescribirla a mano en el registro diario del siguiente día para asegurarte de que no olvidas hacerla.
Este proceso de mover y reescribir información se llama “migración”. Las migraciones ocurren en diferentes escalas de tiempo: diaria, mensual, anual y cada vez que acabas una libreta.
El viernes 29 de marzo hice mi primera «migración mensual».
La migración mensual consiste en migrar todas las tareas pendientes (que aún sigues queriendo hacer) del último mes al nuevo mes. Entonces, para poder hacer esta migración, tienes que leer todas las páginas que escribiste en el mes anterior. De esta forma, te aseguras de no dejar ningún cabo suelto.
Sin embargo, esto es una descripción superficial.
La migración mensual es, además, una reflexión mensual. Como “estás obligado” a leer todas las páginas del mes anterior, lo que acaba ocurriendo es que revives todas las tareas, las decisiones, las ideas, las notas, los eventos y las emociones que tuviste durante todo el mes. Lo que te da una visión global y precisa sobre:
cómo has invertido tu tiempo
qué has priorizado
qué resultados has tenido.
Además, esta reflexión mensual se beneficia de todas las reflexiones diarias que hiciste durante el mes.
En la reflexión diaria destacas con un signo de exclamación ("!") las mejores jugadas que hiciste ese día (tareas cumplidas, ideas, eventos, etc.). Así, durante la revisión mensual, vuelves recordarlas y tienes una oportunidad de oro para integrarlas definitivamente en tu vida.
Un ejemplo personal
A continuación, tienes un ejemplo personal mío que muestra el tipo de reflexiones que puedes tener durante la migración mensual:
El 16 de marzo, hice una reunión online con buen amigo mío, Nathan Fawaz. En estas reuniones solemos compartir nuestro progreso sobre el método Zettelkasten. Sin embargo, en la última reunión, Nathan me propuso hacer una sesión de trabajo conjunta usando la técnica Pomodoro. Fue una experiencia realmente agradable: cada uno trabajamos de forma separada, pero, en las pausas de los Pomodoros, hacíamos una charla breve para explicar cómo nos había ido y que planeábamos hacer en la siguiente sesión de trabajo.
Durante la revisión diaria, escribí en mi Bullet Journal una nota sobre que fue realmente divertido (y útil) trabajar de esta forma con él. Además, marqué esa nota con una exclamación ("!"). Después de eso, tuve la siguiente pregunta: "¿Cómo puedo hacer que esta situación ocurra más a menudo en mi vida?". La primera idea fue continuar haciendo (y priorizando) estas quedadas con Nathan y, además, la segunda idea fue empezar a organizar este tipo de quedadas online a través del Jardín de Gestalt. Marqué ambas ideas con una doble exclamación ("!!").
Durante la migración mensual, he vuelto a leer todas las notas de antes y, finalmente, he creado dos tareas: “Priorizar las quedadas con Nathan” y “Organizar sesiones de trabajo conjunto para el Jardín de Gestalt” :-)
Conclusión: Una reflexión integral de tu vida
El método Bullet Journal no trae ideas nuevas sobre la gestión de tareas o sobre cómo reflexionar sobre tu vida. De hecho, la mayoría de consejos e ideas de este método vienen de:
otros métodos (como puede ser el mismo Getting Things Done)
otras filosofías de vida (como el estoicismo).
Lo que hace realmente bien el método Bullet Journal es empaquetar todos los consejos, ideas y hábitos —que su autor sabe que funcionan— en una herramienta práctica y fácil de usar: una libreta física. De esta forma, todo el flujo de trabajo del método Bullet Journal está orientado a un mismo objetivo: “descubre qué es lo que quieres hacer y alinea tus acciones a eso que quieres”.
Esa es la potencia del método Bullet Journal.
Una reflexión integral de tu vida.
Y tú, ¿sabes qué es lo que realmente quieres en tu vida?
PD: Estoy empezando a organizar la siguiente charla informal y la primera sesión de trabajo en el Jardín de Gestalt. Aún no hay fechas decididas, pero, si quieres ser el primero en enterarte, puedes unirte a este grupo de Telegram ;-)
Referencias:
“Getting Things Done: The Art of Stress-Free Productivity” de David Allen. ↩︎
“El método Bullet Journal: Examina tu pasado. Ordena tu presente. Diseña tu futuro” de Ryder Carroll. ↩︎
Entradas mencionadas o relacionadas:
Publicado originalmente en https://eljardindegestalt.com el 7 de Abril de 2024.
Comparto tus reflexiones sobre el bullet journal. Llevo ya un año practicándolo y ha cambiado mi forma de organizarme y de planificar mis días pero, sobre todo, me ha permitido tener más auto conocimiento gracias a los habit trackers y las pequeñas reflexiones diarias.
Recién he descubierto tu newsletter y ya estoy deseando leer más. Un saludo 👋🏻